Celebrando la Vidaen el Nuevo Milenio Guiones para la celebración de la Cena del Señor Ciclo "A" Miguel Ángel Osimani EDICIONES BETANIA
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DOMINGO 26 DE MARZO DE 2023 DOMINGO Vº DE CUARESMA
PREPARACIÓN: Antes de la salida del celebrante
Con la celebración de este domingo quinto de Cuaresma, damos
inicio a la última semana antes de la Semana Santa, de este tiempo de
preparación y renovación profunda de nuestras vidas, que debe llevarnos a
caminar junto a Cristo cargando la cruz, morir con Él y poder así, resucitar
con Él en la Pascua.
AMBIENTACIÓN:
Luego del saludo inicial y antes del acto
penitencial
El Señor hoy, en la resurrección de Lázaro, nos hace el
anuncio de nuestra futura resurrección, en la que también nuestros cuerpos
volverán a la vida, participando en la vida de Cristo, esto es, vivir
eternamente. Y así, para los creyentes, la muerte no es el final de la vida,
sino el paso a una vida que dura para siempre.
1ª. LECTURA: (Ez
37, 12-14)
(Ver
texto)
El regreso del destierro es para el pueblo de Israel volver
a la libertad, volver a la vida. La visión del Profeta anuncia la vuelta a
Jerusalén y simboliza la vida nueva que trae Cristo, el Mesías.
SALMO RESP.:
(129, 1-5. 6c-8) (Ver texto)
R.
En el Señor se encuentra la misericordia.
2ª. LECTURA:
(Rm 8, 8-11) (Ver
texto)
La voz del Apóstol nos dice que el hombre es conducido por
el Espíritu de Dios y que tiene verdaderamente vida, aunque el cuerpo muera.
EVANGELIO:
(Jn 11, 1-45)
(Ver
texto)
En la proclamación del santo Evangelio, el mismo Jesús nos
muestra, en la resurrección de Lázaro, el anticipo de la suya y también de
la nuestra.
ORACIÓN DE LOS FIELES:
CELEBRANTE:
Hermano, ahora es el
tiempo propicio, ahora es el día de salvación; acudamos pues, a nuestro
Padre del Cielo que nos concede estos días de perdón y presentémosle nuestra
oración comunitaria.
GUÍA:
A cada una de las
peticiones responderemos orando:
"SEÑOR,
ESCÚCHANOS Y DANOS LA VIDA"
v
Padre, para que todos los
hombres, reconociendo que eres el dueño de la vida y que nos has dado la
vida para que vivamos para siempre, encontremos en la Iglesia un sacramento
eficaz de salvación, te pedimos...
v
Padre, para que por la
palabra del Papa Francisco
y nuestros obispos, luchemos para que
sea el espíritu de Cristo el que dirija nuestro cuerpo y nuestro mundo,
te pedimos...
v
Padre, para que en nuestra
patria, todos nos liberemos de
aquello que nos esclaviza y siguiendo
a Jesús, podamos construir
una nación que viva de acuerdo con los valores del Evangelio, te pedimos...
v
Padre, para que todos los
que sufren encuentren en tu Hijo la verdadera fortaleza y alivio, y en
nosotros los auténticos y fraternos hermanos que con el gesto y la palabra
oportuna llegan hasta el hermano solo y desamparado, te pedimos...
v
Padre, para que toda
nuestra comunidad, superando, con el espíritu de tu Hijo, todas las
tentaciones de muerte que nos acosan cada día y luchando contra todo lo que
es muerte y destrucción, muriendo con Él, también con Él podamos alcanzar la
resurrección y la vida, te pedimos...
CELEBRANTE: Padre de
misericordia, atiende favorablemente nuestras peticiones y concédenos que
las saludables prácticas de la Cuaresma dispongan los corazones de tus
hijos, para que celebrando dignamente el misterio pascual, extendamos por
todas partes el anuncio de tu salvación. Te lo pedimos por Jesucristo,
nuestro Señor.
PRESENTACIÓN DE LAS
OFRENDAS:
Para que nuestra ofrenda sea la que el Padre quiere, es
indispensable que le presentemos un corazón que anhela una auténtica
conversión y poder así recibir la gracia de la resurrección.
Al término del “Lavatorio de
Manos” y cuando el celebrante vuelve al centro del altar y antes de la
oración siguiente, se hace poner de pie a la asamblea
DIÁLOGO DEL PREFACIO:
Al iniciarse el Prefacio (antes de
"El Señor esté con vosotros")
Jesús nos ha dicho: "quien cree en mí, aunque muera, vivirá
para siempre", por eso, hoy más que nunca, elevemos nuestra acción de
gracias al Padre.
COMUNIÓN:
El Señor nos ha hablado de la vida que dura para siempre en
la Gloria de Dios, y ahora quiere darnos, con su Cuerpo y su Sangre, un
anticipo de esa gloria, cuando resucitemos al final de los tiempos.
COMUNIÓN ESPIRITUAL:
Al
término de la distribución de la comunión.
Hermanos:
Todos aquellos que no
han podido acercarse a recibir a Jesús Sacramentado, pueden hacer la
Comunión Espiritual rezando la siguiente oración:
Creo Señor mío que estás
realmente presente
en el Santísimo
Sacramento del altar.
Te amo sobre todas las
cosas y deseo
ardientemente recibirte
dentro de mi alma;
pero, no pudiendo
hacerlo ahora sacramentalmente,
ven al menos
espiritualmente a mi corazón.
Y como si te hubiese
recibido, me abrazo
y me uno todo a Ti;
Oh Señor, no permitas
que jamás me separe de Ti.
Amén.
DESPEDIDA:
El Señor aún
nos concede una semana más para disponernos a vivir profundamente la Semana
Santa, no la desperdiciemos; preparemos nuestros corazones para poder
recibir la gracia de la salvación que Él nos ofrece.
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