Celebrando la Vida

en el

Nuevo Milenio

Guiones para la celebración de la Cena del Señor

Ciclo "C"

Miguel Ángel Osimani

EDICIONES BETANIA

 

 

 

 

DOMINGO 30 OCTUBRE DE 2022

DOMINGO 31º DURANTE EL AÑO

 

 

PREPARACIÓN: 

Antes de la salida del celebrante

 

Celebramos hoy el domingo trigésimo primero  durante el año, y en él celebramos nuestro encuentro con el Señor, que nos convoca para darnos a conocer de una manera sencilla y comprensible, su amor inagotable y su deseo de comunicarnos su vida y su perdón.

 

AMBIENTACIÓN: 

Luego del saludo inicial y antes del acto penitencial

 

El encuentro transformador con Cristo es el resumen, de lo que es para nosotros, el llamarnos cristianos, el creer que Jesús también ha entrado en nuestra vida, en nuestra casa y se ha alojado en ella, para cambiarnos. Él nos mira, nos reconoce y pide entrar en nuestra vida; nuestra respuesta debe ser el no eludir este encuentro, sin perder la esperanza a causa de sentirnos pecadores. Jesús hoy nos dice que no hay fe, no hay vida cristiana sin un encuentro con Él.

 

1ª. LECTURA:  (Sb 11, 22-12, 2)       (Ver texto)

 

Este escritor del Antiguo Testamento, en un lenguaje poético y de gran profundidad, nos descubre el amor de Dios que no se complace con el castigo, sino que prefiere el arrepentimiento y la conversión.

 

SALMO RESP.:     (144, 1-2. 8-11. 13c-14)    (Ver texto)

 

                       R.    Bendeciré al Señor siempre y en todo lugar.

 

2ª. LECTURA:    (2 Ts 1, 11-2, 2)    (Ver texto)

 

Después de anhelar que nos mantengamos firmes en la vida cristiana, escuchemos la respuesta que Pablo da a aquellos grupos de creyentes que llaman a las puertas hablando del fin del mundo

 

EVANGELIO:   (Lc 19, 1-10)      (Ver texto)

 

Jesús, en esta narración de su encuentro con Zaqueo, nos da una lección de su manera de actuar, siempre abierto a todos, para hacer posible la superación y la liberación de las personas.

 

ORACIÓN DE LOS FIELES:

 

CELEBRANTE:

 

Queridos hermanos, Jesús ha venido a buscar y a salvar lo que estaba perdido, por eso, en su Nombre, acudamos a nuestro Padre para presentarle los anhelos y problemas de nuestro mundo.

 

GUÍA:  A cada una de las peticiones responderemos orando:

 

"ESCÚCHANOS, SEÑOR"

 

v Por la Santa Iglesia y el Papa Francisco, para que siempre anuncie con su palabra y con sus obras, el amor misericordioso de Dios, que es clemente, rico en piedad, bueno con todos y que quiere comunicarnos su vida y su perdón, oremos...

 

v Por nuestro obispo y nuestros sacerdotes, para que por el ejercicio de su ministerio, siempre podamos obtener la reconciliación, la grandeza, el perdón, la comprensión y la amistad de Jesús, oremos...

 

v Por nuestra patria, para que todos, gobernantes y gobernados, busquemos por sobre todo, el bien común, para que así podamos construir una nación cada vez más justa, más solidaria y más fraterna, oremos...

 

v Por tantos hermanos nuestros que se encuentran sufriendo, para que puedan encontrar en la fe no sólo el consuelo, sino una liberación y una fuerza que los llene de esperanza, oremos...

 

v Por toda nuestra comunidad, para que sintiendo esa sacudida que transformó la existencia de Zaqueo, sintamos la presencia viva y real de Jesús en nuestras vidas y así podamos ver nuestros egoísmos, para superarlos con justicia y generosidad, oremos...

 

CELEBRANTE:

 

Dios y Padre nuestro, que quieres que todos los hombres se salven y lleguen al conocimiento de la verdad, escucha nuestras súplicas y haz que seamos verdaderos continuadores de la obra salvadora de tu Hijo, que contigo vive y reina por los siglos de los siglos.

 

PRESENTACIÓN DE LAS OFRENDAS:

 

Estos dones del pan y del vino, se transformarán en el Cuerpo y la Sangre de Jesús; en ellos ofrezcamos nuestro sincero deseo de tener un encuentro con Él, que transforme verdaderamente nuestras vidas.

 

Al término del “Lavatorio de Manos” y cuando el celebrante vuelve al centro del altar y antes de la oración siguiente, se hace poner de pie a la asamblea

 

DIÁLOGO DEL PREFACIO:

Al iniciarse el Prefacio (antes de "El Señor esté con vosotros")

 

Elevemos a Dios, nuestro Padre, el solemne himno de alabanza y acción de gracias, por su amor misericordioso, que se ha derramado sobre nosotros en su Hijo Jesucristo.

 

COMUNIÓN:

 

Con este banquete eucarístico, en el que ahora vamos a participar, se completa el amor misericordioso de Dios: su Hijo se nos da como verdadero alimento de vida eterna.

 

 

COMUNIÓN ESPIRITUAL:

Al término de la distribución de la comunión.

 

Hermanos:

Todos aquellos que no han podido acercarse a recibir a Jesús Sacramentado, pueden hacer la Comunión Espiritual rezando la siguiente oración:

 

Creo Señor mío que estás realmente presente

en el Santísimo Sacramento del altar.

Te amo sobre todas las cosas y deseo

ardientemente recibirte dentro de mi alma;

pero, no pudiendo hacerlo  ahora sacramentalmente,

ven al menos espiritualmente a mi corazón.

Y como si te hubiese recibido, me abrazo

y me uno todo a Ti;

Oh Señor, no permitas que jamás me separe de Ti.

Amén.

 

DESPEDIDA:

 

Del encuentro de Jesús con Zaqueo, se produjo la transformación de la vida de quien hasta ese momento no había sido ni justo, ni honesto con sus hermanos. De este encuentro nuestro de hoy con Jesús, debe producirse también una transformación que de frutos de justicia, solidaridad y amor hacia los demás.