Celebrando la Vida

en el

Nuevo Milenio

Guiones para la celebración de la Cena del Señor

Ciclo "B"

Miguel Ángel Osimani

EDICIONES BETANIA

 

 

DOMINGO 8 DE AGOSTO DE 2021

DOMINGO 19º DURANTE EL AÑO

 

 

PREPARACIÓN: 

Antes de la salida del celebrante

 

Hermanos, en este domingo décimo noveno durante el año, a todos nosotros se dirige esta palabra: "Levántate, come, porque todavía te queda mucho por caminar"; y ese pan con el que es alimentado Elías, recuerda el maná y es figura del verdadero Pan bajado del Cielo que es la Eucaristía

 

AMBIENTACIÓN: 

Luego del saludo inicial y antes del acto penitencial

 

Dios nos llama hoy a descubrir en su Hijo, su origen divino, lo que no fue reconocido por los mismos habitantes de su pueblo; y Él nos pide que aceptemos en la fe, que Cristo es el alimento que nos asegura la vida eterna, y quienes no aceptan esta verdad, son quienes no se dejan enseñar por Dios. Y Jesús hoy nos pide nuestra aceptación de fe, que es el comienzo de la vida divina en nosotros, y nos dice: "quien coma el Pan Vivo bajado del cielo, vivirá para siempre".

 

1ª. LECTURA:  (1 Re 19, 4-8)        (Ver texto)

 

En este relato muy humano del Antiguo Testamento, se nos anticipa ya el ofrecimiento de Cristo: un pan que nos da la fortaleza para proseguir el camino de Dios.

 

SALMO RESP.:     (33, 2-9)    (Ver texto)

 

                    R.   ¡Gusten y vean qué bueno es el Señor!.

 

2ª. LECTURA:    (Ef 4, 305, 2 )   (Ver texto)

 

San Pablo nos exhorta a deshacernos de todo pecado, a despojarnos del hombre que vive en nosotros y dejarnos conducir por un nuevo Espíritu, el del amor..

 

EVANGELIO:   (Jn 6, 41-51)       (Ver texto)

 

Hoy Jesús nos anuncia el alimento definitivo, el alimento para la vida del mundo: su carne; y quien la coma, vivirá eternamente.

 

ORACIÓN DE LOS FIELES:

 

CELEBRANTE:

 

Y ahora hermanos, seguros del amor de Dios y en la certeza que él nunca deja de escuchar a quien lo invoca, salvándolo de sus angustias, oremos confiadamente, pidiéndole por su pueblo santo y por todos los hombres del mundo.

 

GUÍA:  A cada una de las peticiones responderemos orando:

 

"POR CRISTO, EL PAN VIVO BAJADO DEL CIELO, ESCÚCHANOS SEÑOR"

 

v Padre bueno, te pedimos por la Iglesia, por el Papa Francisco, por los Obispos y todos los pastores que cuidan de tu pueblo, para que repartan con fidelidad el pan de la Palabra y el pan del Cuerpo de tu Hijo, oremos...

 

v Padre santo, te pedimos por nuestro mundo, para que cesen definitivamente los odios, los rencores y la violencia, y los responsables políticos sigan el camino de la razón y abran nuevas posibilidades de diálogo y de acuerdo y así se alcance una auténtica y definitiva paz, oremos...

 

v Padre eterno, te pedimos por todos los que habitan esta nación, para que alimentados por el verdadero Pan de Vida, Él vuelva a ser el fundamento de nuestras familias y de nuestra sociedad, oremos...

 

v Padre misericordioso, te pedimos por todos los niños, especialmente por los más pobres, para que nunca les falte el alimento y las condiciones para desarrollarse plenamente y ser formados en los valores trascendentes que proclamó tu Hijo, oremos...

 

v Padre nuestro, te pedimos por todos los católicos, para que descubramos realmente la dimensión divina de Cristo, nos alimentemos constantemente con su Palabra y con su Cuerpo y confiemos sólo en su ayuda, oremos...

 

CELEBRANTE:

 

Escucha, Padre bueno, la oración de tus hijos; concédenos el que en todos los momentos de nuestra vida repongamos nuestras fuerzas con el alimento de la Palabra y el Cuerpo de tu Hijo, para poder seguirlo a Él, que es el verdadero camino. Te lo pedimos por Cristo, nuestro Señor.

 

PRESENTACIÓN DE LAS OFRENDAS:

 

Debemos tomar conciencia de nuestra responsabilidad de participar cada vez más consciente, activa y fructuosamente en el banquete eucarístico, por eso ahora, ofrezcamos este compromiso a Dios.

 

Al término del “Lavatorio de Manos” y cuando el celebrante vuelve al centro del altar y antes de la oración siguiente, se hace poner de pie a la asamblea

 

DIÁLOGO DEL PREFACIO:

Al iniciarse el Prefacio (antes de "El Señor esté con vosotros")

Con inmensa alegría, unamos nuestros corazones y nuestras voces en una sola, para dar gracias a Dios por darnos el Pan de Vida, el alimento que fortalece y renueva nuestro camino.

 

COMUNIÓN:

 

Nosotros creemos realmente que el Pan eucarístico es verdaderamente la carne de Cristo para la vida del mundo, por eso ahora, al recibirlo vamos a ratificar nuestra fe, con nuestro vibrante Amén.

 

COMUNIÓN ESPIRITUAL:

Al término de la distribución de la comunión.

 

Hermanos:

Todos aquellos que no han podido acercarse a recibir a Jesús Sacramentado,

pueden hacer la Comunión Espiritual rezando la siguiente oración:

 

Creo Señor mío que estás realmente presente

en el Santísimo Sacramento del altar.

Te amo sobre todas las cosas y deseo

ardientemente recibirte dentro de mi alma;

pero, no pudiendo hacerlo  ahora sacramentalmente,

ven al menos espiritualmente a mi corazón.

Y como si te hubiese recibido, me abrazo

y me uno todo a Ti;

Oh Señor, no permitas que me separe de Ti.

 

DESPEDIDA:

 

Volvemos a nuestros hogares fortalecidos por el Pan de Vida, que nos da la capacidad de vivir como auténticos discípulos, escuchando los que Dios nos dice, dejándonos enseñar humildemente por Él, y confiando plenamente en su amor que jamás nos abandona.